POST DIARIO ABC COLOR
A la pesada carga salarial de los 4.500 funcionarios de Copaco se debe sumar otra erogación de alrededor de G. 38.000 millones al año, en concepto de bonificación escolar y antigüedad.
Una de las tantas manifestaciones de los funcionarios de Copaco exigiendo contrataciones y mejoras salariales. / ABC Color
El salario y los sobresueldos equivalen al 60% de los ingresos de la compañía, según fuentes del ente. Los sindicalistas defienden estos sobresueldos argumentando que son derechos adquiridos.
La Compañía Paraguaya de Comunicaciones (Copaco), que viene soportando una aguda crisis económica y financiera desde hace cinco años, está obligada a abonar a los funcionarios dos bonificaciones al mes porque así lo estipula el contrato colectivo firmado con los gremios sindicales.
Dichas bonificaciones abonadas sobre los salarios corresponden a “antigüedad” y “ayuda escolar”. Significan al año alrededor de G. 38.000 millones, según fuentes cercanas a la estatal.
Datos que aparecen en la página web de la compañía parecen dar la razón a las fuentes consultadas, teniendo en cuenta que la mayoría de los 4.500 funcionarios cobran hasta G. 680.000 en concepto de antigüedad, y solo una minoría, montos inferiores, que van desde los G. 100.000 al mes. Teniendo en cuenta la cifra global y los funcionarios existentes, se tiene un promedio de casi G. 500.000 de sobresueldo en el concepto citado.
Lo mismo se puede notar en el rubro “bonificación escolar”, que varía según la cantidad de hijos de asalariado, entre G. 270.000 y G. 520.000 al mes.
El contrato colectivo lo negocian los sindicalistas con la patronal cada tres años, y defienden las bonificaciones porque dicen que las mismas constituyen derechos adquiridos.
El gremio más fuerte es el Sindicato Nacional de Trabajadores de Telecomunicaciones (Sinattel), que siempre amenaza con huelgas para conseguir sus propósitos. El próximo año se debe renovar el citado contrato.
Un último “logro” de los gremialistas con el contrato es que los jubilados cobren un plus. Calculan el monto multiplicando el último salario por los años de servicio. Por citar un ejemplo, el funcionario con 30 años de antigüedad, con un ingreso mensual de G. 5.000.000, se embolsa alrededor de G. 150 millones. Multiplican G. 5.000.000 por 30.
391 jefaturas
Al problema de la superpoblación, en Copaco se le suma otra irregularidad: la cantidad innecesaria de jefaturas. ¡La compañía llegó a contar con 391 jefaturas!
Los departamentos y divisiones se iban creando para justificar el aumento indiscriminado del personal.
Cada cargo tiene una bonificación, que al año significan G. 5.000 millones a la empresa. La bonificación de un gerente asciende a G. 1.700.000; la de un jefe de división, G. 1.500.000; de departamento, 1.300.000; de división, 1.000.000. Los jefes de sección y de supervisión perciben G. 800.000 y 700.000, respectivamente.
En enero de este año, pese a la resistencia de los funcionarios, el directorio de la compañía resolvió eliminar diez jefaturas.
Siempre fue botín político
La compañía telefónica históricamente se constituyó en un botín de los políticos de turno. Sus exadministradores, en su mayoría, eran presidentes de seccionales coloradas. La excesiva cantidad de funcionarios se debe en gran medida a esto. Se aceptaban a los recomendados para cumplir con los favores políticos. Para justificar las contrataciones, los mandamases de turno iban creando nuevas jefaturas. El ente llegó a contar con 391 jefaturas. La consultora Quantum, que procedió a un estudio de la situación del ente para Hacienda, había recomendado reducir jefaturas y la cantidad de funcionarios. Según los datos, alrededor del 80% de los empleados no son técnicos y tampoco ingresaron por concurso.
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